Abstract
En los últimos años se observa una tendencia a recuperar la tesis del innatismo moral desde el ámbito de las ciencias bio-antropológicas. Dicha tesis encuentra apoyo en el descubrimiento de ciertos universales morales y en la constatación de la capacidad humana de producir respuestas morales de forma inmediata. El autor de este trabajo, aun cuando considera plausible que en la conducta moral haya elementos innatos, mantiene que las pruebas aducidas incurren en la falacia del falso dilema: respecto a los universales morales, pueden ser alcanzados racionalmente; respecto a las respuestas morales inmediatas, pueden ser resultado de un proceso de habituación. Para demostrar el carácter falaz de estas demostraciones, el autor se apoyará en la antropología moral de Zubiri.