Abstract
Bajo un paradigma cualitativo-interpretativo, se realizó un análisis de contenido de los planes y programas de filosofía chilenos, respecto de las orientaciones ministeriales acerca del desarrollo del pensamiento complejo y la metacognición contenidos en éstos. A partir de las categorías que emergieron, se procedió a realizar entrevistas a los profesores del nivel, para confrontar la congruencia de los lineamientos con las concepciones y prácticas descritas por ellos.Se constató la existencia de un enfoque académico-racionalista de las concepciones y actividades curriculares, concepciones reduccionistas del pensamiento complejo y la metacognición, trasladando la responsabilidad de la falta de logro a sus estudiantes.